El fuego oculto

El fuego oculto se plantea desde una trama de misterio en torno a unos textos anónimos. Estos alegatos nos trasladan al mito clásico del robo del fuego a Zeus, acción llevada a cabo por Prometeo. Quedando, explícitamente, establecida una analogía entre la alegoría y el devenir en el que se instalan sus protagonistas: personas de nuestro tiempo, a las que logramos identificar en el universo de nuestra existencia. En el transcurso de una semana y, desde la textura más adyacente a la soledad del ser humano, el protagonista, el profesor Bellarrubia, va descubriendo, con un impenitente acento crítico, las veleidades que padece la universidad española actual. El autor insiste, de modo decidido, en las concepciones que, acerca del trabajo, elaboran los seres humanos, instaladas en el desamparo de argumentos déspotas para reconfortar su desierto reflexivo y pasional. Exhibe los acomodos de las relaciones humanas, en un ambiente de clase media aburguesada y empeñosa, con anhelos de intelectualidad mansa, que hace coincidir sus beatitudes y descansar sus ideales en liturgias escasamente indagadoras. La tragedia, del hombre y de la universidad, es la impasible observadora del relato, adherida escrupulosamente a lo cotidiano. En todas y cada una de sus páginas, se conspira para que el lector se inscriba, sin apenas advertirlo, y asista a las predicciones más ignotas y recónditas de su propia vida: su fuego oculto. El fuego oculto encarna el primer proyecto literario de José Manuel Hernández López que nació en Madrid en la década que consagró a The Beatles. En 1980 inicia los estudios de Psicología que culmina con la lectura de su Tesis Doctoral en 1990. Ha impartido diferentes cursos en países latinoamericanos. Es autor de numerosos libros y artículos de carácter científico. En este momento, está escribiendo un ensayo titulado Los límites de la personalidad. Actualmente es profesor en la Universidad Autónoma de Madrid.