Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
Hieronder kan je kiezen welke cookies je wilt inschakelen:
Technische en functionele cookies
Deze cookies zijn essentieel om de website goed te laten functioneren, en laten je toe om bijvoorbeeld in te loggen. Je kan deze cookies niet uitschakelen.
Analytische cookies
Deze cookies verzamelen anonieme informatie over het gebruik van onze website. Op die manier kunnen we de website beter afstemmen op de behoeften van de gebruikers.
Marketingcookies
Deze cookies delen je gedrag op onze website met externe partijen, zodat je op externe platformen relevantere advertenties van Standaard Boekhandel te zien krijgt.
Je kan maximaal 250 producten tegelijk aan je winkelmandje toevoegen. Verwijdere enkele producten uit je winkelmandje, of splits je bestelling op in meerdere bestellingen.
GABRIEL ARESTI (Bilbao, 1933-1975) fue un gran renovador de la literatura vasca en los años sesenta. La publicación de sus libros Harri eta herri (Piedra y pueblo, 1964), Euskal harria (La piedra vasca, 1967) y Harrizko herri hau (Este pueblo de piedra, 1970), en los que utilizó la metáfora de la piedra como un símbolo de identidad y de resistencia a la dictadura de Franco, generó una verdadera revolución por su acercamiento al compromiso social, desplazando a un simbolismo que se había manifestado sin cambios durante décadas.El ciclo de la piedra recoge los poemas más significativos de esa aventura creativa y expone una imagen completa y compleja de la expresión literaria y del pensamiento social del autor. Gabriel Aresti utilizaba su biografía para convertirla en una alegoría de carácter social. El poeta, que había leído con atención a los escritores clásicos vascos, expresó su mundo urbano a través de una dicción poética que subrayaba el registro cotidiano con el fin de conseguir una poesía directa y fácilmente entendible. Su obra poética fue muy discutida en su tiempo, pero sus posiciones creativas fueron seguidas por los jóvenes y han tenido una influencia sustancial en los escritores vascos contemporáneos. JON KORTAZAR