Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
Hieronder kan je kiezen welke cookies je wilt inschakelen:
Technische en functionele cookies
Deze cookies zijn essentieel om de website goed te laten functioneren, en laten je toe om bijvoorbeeld in te loggen. Je kan deze cookies niet uitschakelen.
Analytische cookies
Deze cookies verzamelen anonieme informatie over het gebruik van onze website. Op die manier kunnen we de website beter afstemmen op de behoeften van de gebruikers.
Marketingcookies
Deze cookies delen je gedrag op onze website met externe partijen, zodat je op externe platformen relevantere advertenties van Standaard Boekhandel te zien krijgt.
Je kan maximaal 250 producten tegelijk aan je winkelmandje toevoegen. Verwijdere enkele producten uit je winkelmandje, of splits je bestelling op in meerdere bestellingen.
¿Podrías enamorarte de un padre soltero... que además es tu jefe? Llega la tercera parte de Mile High, el romance deportivo que ha enganchado a #Booktok Kai Soy padre soltero y lanzador titular del principal equipo de béisbol de Chicago. No doy abasto para criar a mi hijo y todas las canguros anteriores me han durado solo unas semanas antes de despedirlas. Ahora, mi entrenador se ha puesto firme y ha contratado a la única persona a la que no puedo echar, su hija. Miller Montgomery es la última mujer de la que debería enamorarme. Demasiado alocada, joven y desapegada. Chicago no es más que una breve parada para ella. Creía que contaría los días que faltaban para que se fuera, pero el verano es muy corto cuando quieres que se quede para siempre. Miller Como chef repostera de alto nivel, estoy desesperada por demostrar lo que valgo. Pero crear un postre nuevo inspirador es más difícil de lo que parece. Debería centrarme en la cocina, pero en cambio he dejado que mi padre me convenza para que pase mi tiempo libre cuidando al hijo de su jugador estrella. Kai Rhodes ha olvidado cómo divertirse y yo me muero de ganas por refrescarle la memoria. Pero cuando su hijo y él empiezan a convertirse en un hogar para mí, tengo que recordarnos a ambos que me voy de Chicago al final del verano. No quiero abandonar mi vida anterior, pero, cuanto más tiempo paso con Kai, más pierdo el control.