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Este es un libro de terror. Al igual que en Frankenstein, nosotros hemos construido al monstruo, nosotros somos sus víctimas y ahora tratamos inútilmente de detenerlo. Los hechos son simples: la población mundial crece, los recursos tienen un límite y las consecuencias de explotar esos recursos están cambiando de forma irreversible las condiciones de vida de nuestro planeta. No se trata de una denuncia más. El autor de este libro es un científico y todo cuanto aparece en estas páginas procede de estudios comprobados que nos transmiten el mismo mensaje: Estamos condenados. Tiramos la mitad de lo que compramos como si los productos fueran inagotables; explotamos los recursos naturales como si salieran de la nada; y seguimos extendiéndonos por la faz del planeta. Hagamos lo que hagamos, cerremos los ojos, nos vayamos a vivir al campo o nos suicidemos, el resultado será el mismo. No podemos impedir nuestra propia desaparición como especie. «Emmott nos lanza predicciones terribles apoyadas por hechos incuestionables» (Andrzej Lukowski, Time Out). «A quien quiera conocer la asombrosa cantidad de agua que se gasta en fabricar una hamburguesa, Emmott le dará la respuesta» (The Independent).