Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
Hieronder kan je kiezen welke cookies je wilt inschakelen:
Technische en functionele cookies
Deze cookies zijn essentieel om de website goed te laten functioneren, en laten je toe om bijvoorbeeld in te loggen. Je kan deze cookies niet uitschakelen.
Analytische cookies
Deze cookies verzamelen anonieme informatie over het gebruik van onze website. Op die manier kunnen we de website beter afstemmen op de behoeften van de gebruikers.
Marketingcookies
Deze cookies delen je gedrag op onze website met externe partijen, zodat je op externe platformen relevantere advertenties van Standaard Boekhandel te zien krijgt.
Je kan maximaal 250 producten tegelijk aan je winkelmandje toevoegen. Verwijdere enkele producten uit je winkelmandje, of splits je bestelling op in meerdere bestellingen.
Una visita catastrófica a Ikea en donde nada ocurre como estaba previsto, una cita a ciegas fracasa por varias incompatibilidades, una madre entra en pánico al descubrir que su hijo está en plena adolescencia y no sabe qué hacer con él? Distintas situaciones cotidianas que nos pueden confundir y hacernos pensar que estamos pasando una mala racha. ¿Qué tenemos que hacer para evitar que nos entre el pánico o para no acabar llorando? ¿Y si invitamos a Platón, Spinoza, Nietzsche o Wittgenstein para hablar de estos temas? ¿Qué habría contestado Kant a un mensaje de ruptura? ¿Aristóteles habría tomado otro vodka más? ¿Qué nos diría Epicuro sobre nuestras angustias? ¿Qué haría Spinoza en Ikea? Los filósofos salen por fin de las bibliotecas para ayudarnos a reaccionar con humor a todas las sorpresas de la vida.áEste libro original y curioso recrea doce situaciones de crisis y doce filósofos capaces de tranquilizarnos y ayudarnos a desdramatizar. Se trata de momentos que se nos escapan, de esos minutos de caos en los que todo se tambalea; esos instantes que nos llevan al enfado, el llanto, el sentimiento de culpa, la incomprensión, la vergüenza? ¿Cómo no buscar una respuesta en palabras o ideas que han sobrevivido a lo largo de los siglos?