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«Antes de los años terribles yo era un niño feliz en ese lugar. Laáfelicidad parecía el estado natural de la vida, algo tan obvio comoáque cada mañana salía el sol. Los primeros rayos de luz se colabanáentre las ramas de palma del techo aquella mañana en la que todoáempezó a cambiar.»La vida de Isaías volvió a empezar el día que llegó a Barcelona siendo un muchacho y dejó atrás su mundo. Después de mucho tiempo ha construido una nueva vida junto a su pareja, mientras intenta abrirse camino con un negocio de restauración de bicicletas. Todo cambia el día que recibe la visita de Emmanuel, un antiguo conocido que lo convence para que regrese a Uganda y participe en un encuentrosobre la reconciliación histórica de su país.Aceptar esa propuesta hará resurgir un pasado que Isaías creía haber dejado atrás. Se verá forzado a enfrentarse al niño que fue, mirarlo a los ojos sin concesiones y perdonarse a sí mismo, si quiere seguiradelante con su vida y no perder a su mujer, que pronto, y de la peor manera, descubrirá una terrible verdad: no siempre lo conocemos todo de aquellos a quienes amamos.Cuando se ha llegado demasiado lejos, huir no es una opción.